El Partido Comunista de España quiere hacer un llamamiento a la mayoría social trabajadora, a quienes están sufriendo directamente la consecuencias de una crisis que está siendo utilizada por el capital como la gran excusa para imponer una serie de medidas que aseguren su dominio sobre las riquezas naturales del planeta, implantando una forma de vida que le asegure obtener el máximo beneficio a costa de aumentar la explotación de la mayoría social trabajadora y eliminando toda capacidad de decidir en una dictadura de lo que llaman mercados que no son otra cosa que dominio del capital sobre todas las instituciones de representación ciudadana.
Frente al intento de impulsar una salida antisocial a la crisis que se sustente en un denominado Pacto de Estado, y con la intención de asegurar una nueva transición, que nos lleve hacia una democracia limitada y secuestrada, en la que el bipartidismo monárquico asegure por décadas la defensa de los intereses del capital, el PCE hace un llamamiento a la Rebelión Democrática en favor de una salida de la crisis social, anticapitalista y democrática en una España Federal y Republicana.
Para ello ponemos nuestra fuerza política, nuestra militancia, al servicio de la construcción de un Bloque Social de carácter alternativo que sirva para acumular fuerzas y poder configurar una Alternativa de Estado, con una nueva economía al servicio de la gente, una nueva sociedad justa e igualitaria, configurada en una República de mujeres y hombres libres del mal social de la explotación.
En definitiva, llamamos a seguir trabajando por la construcción de un Bloque Social Alternativo que se plantee conseguir la Ruptura Social y Democrática. Bloque que plasme la unidad de la clase trabajadora, de las fuerzas de la cultura, de la juventud, de las mujeres y de los sectores populares a los que llamamos a rebelarse, a exigir una salida de la crisis que no será creíble si no comienza por reclamar una auditoria ciudadana de la deuda pública y la ruptura con las políticas de la Troika.
Hay que ser claros y directos con nuestro pueblo y en consecuencia proclamar que en el marco de la actual configuración de la Unión Europea, en el marco de lo que se llama la Europa del Euro, bajo el dominio de la OTAN, no es posible una salida social y democrática de la crisis, al contrario, cada vez se exigirán más sacrificios a la mayoría social trabajadora, cada vez se limitará con más claridad la capacidad de decidir de los pueblos, cada vez se utilizarán métodos más represivos y autoritarios y cada vez la guerra será un instrumento al servicio del capital en su objetivo de apoderarse de los recurso naturales del Planeta. La imposición de una Europa Neoliberal, al servicio del imperialismo, con la OTAN como brazo armado, es incompatible con la Democracia y las políticas sociales.
En defensa de una salida social, anticapitalista y democrática de la crisis llamamos a la mayoría social, trabajadora al fortalecimiento de los sindicatos y organizaciones sociales de clase que están siendo atacadas y acosadas por la derecha más extrema, llamamos a la máxima participación ciudadana en todas las movilizaciones que se convoquen contra las agresiones del capital a través de sus medidas más represoras LOMCE, reforma Ley del Aborto, Reforma Laboral, Legislación autoritaria, etc. para conseguir una respuesta contundente que se configure en una alternativa de futuro.
De forma especifica, el Partido Comunista de España apoya y lleva tiempo implicado con los colectivos que están activando las Marchas de la Dignidad, como un referente de la necesidad de plantar cara a las agresiones que están llevando a millones de personas al paro y la exclusión social, marchas que llegarán a Madrid el próximos 22 de marzo en una gran movilización estatal que entendemos como un paso más en la acumulación de fuerzas, de resistencia y de configuración del Bloque Social Alternativo.
En este marco el Partido Comunista de España considera que ha llegado el momento de plantear la convocatoria de una Jornada de Protesta Cívica que de una forma unitaria y descentralizada en todo el territorio nacional implique en su desarrollo a quienes hoy sufren las consecuencia de la mayor crisis que se recuerda y que ven con indignación como son precisamente quienes provocaron la crisis, quienes más partido están sacando de ella.
Esta JPC en la que puedan desarrollar acciones de desobediencia cívica, de protesta ciudadana y de rechazo de todas las iniciativas que se están desarrollando para imponer la salida antisocial y autoritaria a la crisis puede ser un instrumento unitario y trasversal al servicio de la mayoría social trabajadora.